¿Desea que sus padres fueran más estrictos en su crecimiento?

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¿Desea que sus padres fueran más estrictos en su crecimiento?
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Anonim
El primer recuerdo que tengo de que mi padre me disciplinó fue cuando lancé un silbido cuando estaba en cuarto grado. Fui a su oficina y rompí todos sus papeles meticulosamente mecanografiados y me fui a la cama llorando porque no me permitió hacer algo. No había una computadora para guardar tu trabajo, solo copias originales que debían volver a escribirse minuciosamente si algo no funcionaba.
El primer recuerdo que tengo de que mi padre me disciplinó fue cuando lancé un silbido cuando estaba en cuarto grado. Fui a su oficina y rompí todos sus papeles meticulosamente mecanografiados y me fui a la cama llorando porque no me permitió hacer algo. No había una computadora para guardar tu trabajo, solo copias originales que debían volver a escribirse minuciosamente si algo no funcionaba.

En lugar de despertarme para el castigo, mi padre esperó hasta la mañana siguiente cuando me tranquilicé. Sabía que lo que había hecho estaba mal y sentí una tremenda sensación de culpa y temor. Se sentó a mi lado y me dijo calmadamente .Hijo, lo que hiciste estuvo mal anoche. Esos documentos me tomaron horas escribir. No hagas eso de nuevo.

Mi padre era severo, pero compasivo. Como no me gritó ni golpeó, desarrollé un enorme sentido de apreciación por su guía. Empecé a escuchar seriamente todos sus consejos y ser más compasivo como persona a medida que crecía. Estoy todo sobre segundas y terceras oportunidades.

LO QUE MI PADRE ME ENSEÑÓ

Además de enseñarme compasión, mi padre también me enseñó a ser frugal y me permitió descubrir nuevos intereses que no habría descubierto sin él.

Frugalidad / Dinero

Fue mi padre quien me inculcó el atributo de la frugalidad. Siempre insistí para que comprara un buen auto que creciera, pero él siempre se negó. Una vez nos llevó en un Datsun 1976 sin pintura y tres tapacubos faltantes. Yo era un estudiante de secundaria en 1989 y literalmente me agaché cuando fui conducido a la escuela porque me daba vergüenza viajar en un TPV de 13 años.

Afortunadamente, el coche estaba tan destrozado que cuando lo saqué a girar durante un monzón una noche con 13 años y perdí la tapa del cubo, ¡no tenía ni idea!

Cada vez que íbamos a comer, él siempre nos animaba a pedir agua sabrosa con limón en lugar de bebidas a precios razonables. Desde que puedo recordar, siempre íbamos a buffets para obtener lo mejor de nuestro dinero. Alternativamente, iríamos a comer a un restaurante donde había encontrado un cupón en el periódico. La comida siempre fue buena y aprendí a buscar siempre ofertas antes de gastar dinero.

Hasta este día, todavía tengo un momento muy difícil para pedir algo más que agua de limón. Incluso cuando anhelo una cabina con cuerpo profundo para ir con mi costilla de edad seca de 28 días, lo máximo que pediré es un vaso y no una botella. Me siento demasiado culpable pagando un 100% de margen por alcohol.

Ser frugal se trata de encontrar valor y evitar el desperdicio. Al aprender a ser frugal al crecer, no fue difícil ahorrar el 50% + de mis ingresos después de impuestos cada año, sin importar lo poco o lo que gané después del primer año de trabajo. La inflación de mi estilo de vida creció mucho más lentamente que la de mis colegas colegas que compraron autos lujosos y casas enormes. Sin abrazar la frugalidad, no habría podido escapar de Corporate America a los 34 años.

Mi padre me dio libertad.

Carrera

Fue mi padre quien me presentó al mercado de valores cuando tenía 18 años. Estaba revisando sus declaraciones mensuales en la mesa del desayuno cuando comenzamos a tener una discusión sobre cómo leer los precios de las acciones más recientes en el periódico. Desde allí, me presentó a invertir en línea a través de su cuenta de corretaje Charles Schwab.

Como estudiante de último año en la universidad estaba tan cautivado con la inversión en línea que decidí agrupar mis clases para poder pasar dos días a la semana negociando en el mercado de valores sin interrupción. Siempre quise ser un "hombre de negocios" que crecía en el extranjero. Pero no fue hasta que mi padre me presentó al mercado de valores donde sabía que tenía que encontrar una carrera en finanzas.

La mayoría de la gente quiere ingresar a la banca de inversión cuando hablan de una carrera en finanzas. Pero no quería tener nada que ver con la creación de libros de presentación para clientes. Quería negociar acciones y hablar con clientes que invirtieron en acciones. Equities fue el departamento de elección.

Gracias a mi padre, no hubo necesidad de pasar de mis 20 años imaginando lo que quería hacer en la vida. Tenía una idea de lo que quería hacer cuando tenía 14 años, y sabía muy bien lo que realmente quería hacer para el primer semestre del último año.

Deportes

La vida estaría incompleta si no tuviera deportes en mi vida.

Mi actividad favorita fue jugar a atrapar a papá después de que llegó a casa del trabajo. Solía jugar en la universidad y él me enseñó a lanzar una pelota. Jugué en la tercera base como un niño, una posición aterradora ya que a menudo tendría que atrapar cohetes de la mayoría de los bateadores diestros. Aún más intimidante era tratar de hacer saltar la pelota, que a veces rebotaba de manera divertida y me golpeaba la cara. Un día me dijo que, en lugar de esperar pasivamente a que los golpes llegaran a mí, corriera agresivamente hacia la pelota. Su consejo me ayudó a vencer mis temores de ser golpeado. Todavía recuerdo correr hacia un quemador de gusano, cortar el campocorto, recoger la pelota a mitad de paso, y tirar el corredor en la primera base frente a una multitud. Fue uno de mis momentos de mayor orgullo. Ve tras las cosas y no dejes que vengan a ti.

Desafortunadamente tuve que elegir entre el tenis o el béisbol en la escuela secundaria porque sus temporadas se superpusieron. Elegí el tenis, otro deporte que mi padre me enseñó. Solíamos jugar todas las semanas en la única cancha de la Embajada de los Estados Unidos en Kuala Lumpur. Recuerdo que finalmente le quité un set cuando cumplí 13 años, ¡aunque todavía podría negar ese hecho! El tenis es un hermoso juego que prueba la mente. No hay nadie para rescatarlo, y la presión está puesta en usted para tener éxito.

Sin los deportes, no habría tenido tanta disciplina o resistencia para trabajar esas largas horas o tomar la presión constante sobre Wall Street. Los deportes te derrotan todo el tiempo, pero también te enseñan la resiliencia, el trabajo en equipo y la necesidad de una buena ética de trabajo.

LA INTENCIÓN ES TODO

Mi padre no quiere ser demasiado crítico. Él solo quiere lo mejor para mí. Si no le importaba, no leería todo lo que escribo ni me daría consejos para mejorar. A veces es difícil criticarme porque dedico mucho esfuerzo a mi trabajo. Sé que hay espacio constante para mejorar. En general, tengo esta actitud de "les mostraré", pero a veces la crítica me hace no querer trabajar mucho para que no esté tan emocionalmente involucrado.

Dar una crítica constructiva sin desinflar la motivación de alguien es una habilidad que pocas personas son expertas en implementar. Todos necesitamos trabajar constantemente en nuestras habilidades de comunicación. Aprende a escuchar Aprende a empatizar. Aprenda a comprender cuánto ha intentado la otra persona antes de dar rienda suelta a su consejo. Comience con algo positivo, discuta un área que necesita trabajo, y finalice con un resultado positivo final que es la mejor manera de hacerlo.

Estoy absolutamente agradecido por mi padre, y preferiría tener padres estrictos que crezcan sobre padres que simplemente no parecieran importarles.

¿Qué hay de tí? ¿Deseas que tus padres fueran más estrictos contigo cuando creciste?

Gráficos por Kongaline.com

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