A pesar de la envidiosa genética de mi amiga, ella no es exactamente una mujer de hierro cuando se trata de deportes y actividades al aire libre. Luego de recorrer tres millas en un recorrido de 10 millas en bicicleta, ella se caca y me saluda con la mano para tomar un descanso. Mientras tanto, me voy "lah, lah, lah"En mi cabeza, sin siquiera romper a sudar mientras disfruto de las gloriosas vistas de la Bahía. Dejé que se pusiera al corriente y tomamos una parada de cinco minutos en boxes donde ella recupera el aliento mientras hago algunos estiramientos y sentadillas.
EL GIMMICK
Un día, mi amigo me cuenta sobre un excelente programa de incentivos en nuestro gimnasio local. La bromeo a menudo porque a pesar de su membresía de $ 100 / mes, nunca va. Ella viene a enseñarme una nueva tarjeta reluciente que dice: "QUEMAR PARA GANAR!" Hmmm, ¿qué es eso que le pregunto? Ella me dice que si va al gimnasio 20X en los próximos dos meses, se le dará la oportunidad de ganar una camiseta gratis, calcetines, gafas de natación, un fin de semana en Napa o dos rondas de golf que ella hace no jugar en algún club de campo en algún lado.
De repente, noto una transformación. ¡De ir tal vez una vez al mes, mi amigo comienza a ir 3-4 veces por semana! Todo por qué? ¿Una oportunidad de ganar una simple camiseta? Innecesario decir, después de dos meses, ella fue absolutamente arrancada. Estamos hablando de abdominales tipo Madonna, y afortunadamente no de brazos tipo Modonna, porque eso es simplemente aterrador. Cuando llegó el momento del sorteo, alegremente sacó su tarjeta BURN TO EARN y le dio un beso de buena suerte.
Por fortuna, ella ganó absolutamente squat en la primera ronda. Afortunadamente, hubo una ronda de consolidación y allí escuchó ".Y el ganador de un nuevo par de calcetines tubulares es … ¡Lisa!"Un chillido de alegría salió de su pequeño cuerpo mientras saltaba de un lado a otro"¡Gané! ¡Gané! Wheeee!"Creo que rodé los ojos porque no gané nada y no podía creer su suerte. Nuevos calcetines tubulares. ¡Dulce!
CONCLUSIÓN
Con solo administrar un pequeño programa de recompensas, nuestro club de salud logró atraer a un cliente notoriamente bueno (uno que paga a tiempo y nunca lo hace) la motivación de ir 15 veces más de lo normal. Voy 10 veces + un mes de todos modos, así que no fue un gran problema. Pero para Lisa, era como ver a una nueva persona por completo. La lección aprendida es que la próxima vez que quieras hacer que alguien haga algo, tentarlos con algodón que calienta los pies.
Saludos,
Sam @ - "Cortar a través de los misterios del dinero"
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